Los alimentos que se ingresen serán aquellos iguales y/o de similares características a los que se vendan en dichos locales, de acuerdo a los usos y costumbres del mercado.
Entre lavarnos ducharnos, lavarnos los dientes, regar las plantas y lavar el auto sin considerar el cuidado de este recurso, podemos emplear más de mil litros de agua.