El ex presidente brasileño Luiz Inacio Lula da Silva criticó a las elites que defienden la desigualdad social.
“La reducción de las desigualdades incomoda a algunas personas en Brasil en momentos donde los más carenciados pueden hasta viajar en avión y gozan de una mayor capacidad de consumo", declaró el ex presidente al Folha de Sao Paulo.
Asimismo, rechazó haber dejado una "herencia maldita" a Dilma Rousseff, actual presidenta de Brasil.
"Voy a volver a viajar por Brasil y hablar con las personas", prometió Lula, quien afirmó que regresará a la política de cara a las elecciones de 2012.