El objetivo es que más hinchas peruanos se reúnan la noche del 21 en los exteriores del Hotel donde vaya a dormir la selección chilena y hacer mucha bulla y así, el rival no dormirá bien.
Luego de la primera fecha del grupo C, los barristas de ambos países fueron protagonistas de disturbios en las afueras del estadio Bicentenario en San Juan.