Kabul.- Una vez conocida la muerte de Osama Bin Laden sus principales seguidores han comenzado emitir declaraciones de venganza hacia todos aquellos que participaron en la eliminación del líder de Al Qaeda.
Así, el grupo extremista afgano Talibán anunció que cobrará venganza por la muerte de su ídolo y prometió realizar sangrientos contra EE UU y Pakistán.
“Ahora los gobernantes de Pakistán, el presidente Zardari y el ejército serán nuestro primer objetivo. América será nuestro segundo objetivo”, señaló Ehsanullah Ehsan, portavoz de los fundamentalistas islámicos.
Poco tiempo después de conocerse esta declaración una bomba estalló en una mezquita en el norte de Pakistán y provocó la muerte de una mujer y tres niños.