Luego de varias reuniones al respecto, los asistentes a la Cumbre del G-8 decidieron destinar 40.000 millones de dólares a las naciones que conforman la conocida “Primavera Árabe”, como forma de ayudar a estos últimos a mejorar la calidad de vida de sus pueblos.
Así lo anunció el presidente francés Nicolas Sarkozy, quien indicó además que los primeros países de este bloque en recibir parte del dinero serán Egipto y Túnez (650 y 425 millones de euros, respectivamente).
Como se recuerda, la actual cumbre del G-8 se está realizando en Deauville, Francia, y reúne a las potencias económicas más importantes del mundo como Japón, Estados Unidos, Italia, Rusia, Alemania, Reino Unido y Canadá.