Por eso la realeza es calificada de 'ridícula' para muchas personas, y para otras, no. El Príncipe Felipe demostró el pasado fin de semana que la monarquía en España debe continuar pese a los rechazos populares, como en este caso, que reclaman un trato justo e igual para todos. Es decir, que se desterre la palabra plebeyo. Mire el video y jusgue Usted mismo.