Atenas.- En medio de una ciudad presa de la anarquía y la violencia el Parlamento griego ha vuelto a reunirse hoy en Atenas en una sesión extraordinaria para votar una por una y por segundo día consecutivo las medidas que forman parte del plan de ajuste económico aprobado ayer con el que se espera poner fin a la grave crisis económica que vive el país.
Entre las medidas más polémicas y que son repudiadas por la población estaría la eliminación de de 150,000 empleos en la administración pública, reducción de sueldo a los funcionarios, recortes en el gasto de sanidad y educación y subidas de impuestos.
En las calles de la capital griega, mientras tanto, miles de personas se vuelven a enfrentar a la Policía en choques que ya han dejado decenas de detenidos y unas 165 personas heridas.
El plan de ajuste aprobado el miércoles permitiría el ahorro de 78,000 millones de euros hasta el 2015 y la reducción del déficit público que hasta el día de hoy supone una carga del 10% de Producto Bruto Interno (PBI) del país.