Yang Junsheng, de 24 años, se salvó milagrosamente de morir luego de que su auto impactara con cientos de barras de acero en su parabrisas que iban directo hacia él.
De esta manera, el ciudadano chino optó por agacharse rápidamente y solamente quedó con algunos rasguños en la mejilla izquierda, debido al accidente ocurrido en Taizhou, provincia de Zhejianag, en China.
Fue así como Junsheng explicó que lo único que le vino a la mente en ese momento fue agacharse en el asiento. "Escuché una explosión y cuando el coche se detuvo no me podía mover porque el auto estaba lleno de barras de acero por todas partes", sostuvo a la prensa de dicho país.
Finalmente, el afortunado hombre fue a un hospital donde le hicieron un chequeo en el que los médicos dijeron que no tenía graves lesiones.