La policía tomó el total control de una de las favelas más temidas de Rio de Janeiro. Y es que fueron necesarios más de 3000 policías y soldados para garantizar el éxito de la operación que tuvo lugar en Rocinha.
El gobernador de Rio de Janeiro, Sergio Cabral expresó, “Estamos recuperando este territorio para los 100.000 ciudadanos de Rocinha, que necesitan la paz”.
Esta operación fue calificada como una de las más trascendentales en la historia de Brasil, y es que no fue necesario hacer un sólo disparo para hacerse del poder de la favela. Esta acción forma parte de una campaña que tiene como objetivo principal expulsar a las pandillas que dominan estos lugares.
Se calcula que sólo en la favela de Rocinha ingresan más de 50 millones de dólaresanuales, producto de la venta de drogas.