El peruano Humberto Morales, quien se encontraba trabajando en el crucero Costa Concordia el día que naufragó, contó esta mañana tuvo que quedarse hasta el último en la embarcación para ayudar a las personas a abandonar el barco en pleno hundimiento.
“A nosotros los tripulantes estamos encargados a calmar a los pasajeros y eso fue lo que hicimos, es nuestro deber”, contó Morales en el programa Primera Noticia.
Nuestro compatriota contó que retornó hasta tres veces al barco para rescatar a decenas de personas y que pese a todo eso no se siente un héroe.
Asimismo, criticó duramente al capitán del crucero, Francesco Schettino, quien abandonó a su tripulación para salvarse él primero.