Presidente Amadou Toumani Touré, dimitió formalmente ayer domingo como parte de un acuerdo con los golpistas para dar estabilidad a Mali.
Desde su escondite, Touré, dijo, "Estoy haciendo esto sin ningún tipo de presión, y estoy haciendo esto de buena fe, todo por amor a mi país. He decidido entregar mi carta de renuncia".
El Ministro de Relaciones Exteriores de Burkina Faso, Djibril Bassolé, que actuó como mediador internacional, confirmó que una carta de renuncia había sido presentada. La renuncia será allanar el camino para los líderes del golpe a un lado y dejar que el presidente del Parlamento asumir el control.
Dioncounda Traore, el presidente del parlamento, pasó dos semanas en Burkina Faso, volvió el sábado a Malí, de acuerdo con la cadena CNN. Se espera un gobierno de transición, aunque no quedó claro cuándo iba a asumir el cargo.
Un comunicado de la Comunidad Económica de Estados de África Occidental (CEDEAO) dijo que "decidió levantar todas las sanciones impuestas a Malí, con efecto inmediato", después de que los líderes del golpe acordaran restablecer el orden constitucional, según publica minnpost.com
Después de tres días de negociación y la creciente presión internacional, la junta de Malí, dijo el viernes que entregará el poder a cambio de la amnistía de la persecución y el levantamiento de las sanciones.
Antes del golpe, Malí tenía una tradición democrática que se extiende más de dos décadas.