Moody’s anunció una rebaja en la calificación de la petrolera argentina YPF tras la nacionalización parcial por parte del gobierno argentino. Esta argumentó que la medida “refleja incertidumbre con respecto a la manera en que el gobierno la administrará”.
Según un comunicado de prensa, la agencia estadounidense informó una baja de la empresa en escala global y moneda local a “B3” desde “Ba2”. Mientras tanto, la calificación en escala nacional pasó de un “Aa2” (sobresaliente) a un “Baa3” (aprobado bajo).
La acción se da un día después que la presidenta Cristina Fernández, ordenara la intervención inmediata de la petrolera YPF para la expropiación del 51% de las acciones de la compañía en manos de la española Repsol.
Por su parte, la otra agencia de calificación, Fitch Ratings, colocó al grupo argentino bajo vigilancia negativa.