Luego de ser restituido como director del centro penitencial de Lurigancho, el coronel de la Policía nacional Tomás Garay advirtió que la controvertida medida de corte de cabello a los internos del lugar se seguirá realizando, a pesar que la misma habría sido la causante de su destitución de hace un mes.
“Esta medida del corte de pelo se va a mantener. Defintivamente, es un corte de pelo número 3, escolar, ni siquiera militar. Verán ustedes que nosotros tenemos limitaciones en el aspecto de recursos humanos, pero nos desdoblamos porque nuestra misión es mantener el orden y la seguridad ciudadana. Lurigancho era un desorden y ahora la política de la Policía hace que este penal ya no sea uno de los más peligrosos del mundo”, comunicó el agente del orden.
Asimismo, Garay negó que esta medida se haya creado con “mala intención”, asegurando que velar por la integridad de los reos está entre sus principales objetivos.
“Creo de que acá en ningún momento hubo una mala intención o una mala forma, tanto así que soy uno de los principales defensores de los derechos de los internos. Yo respeto todas las opiniones de los funcionarios”, manifestó en RPP TV.