El actor británico Rowan Atkinson, conocido por el personaje de Mr. Bean, es la cara más visible de una campaña para derogar una ley que prohíbe desde 1986 el uso de "palabras insultantes” en el Reino Unido.
"El problema de proscribir los insultos es que cualquier cosa se puede interpretar de ese modo: la crítica, la caricatura, el sarcasmo. Incluso mantener una opinión distinta a la ortodoxa se puede considerar un insulto,” defendió Atkinson en el lanzamiento de una campaña en la que participan otras personalidades británicas.