Washington.- Una investigación presentada por la revista “Geology” señala que el movimiento telúrico de 5,6 grados Richter que remeció el estado de Oklahoma (Estados Unidos) el 6 de noviembre de 2011, tuvo su origen en los residuos de perforaciones tradicionales de empresas dedicadas a la extracción de petróleo.
De acuerdo al informe de un grupo de geofísicos de la Universidad de esa jurisdicción en conjunto con la Universidad de Columbia y la USGS, un día antes del seísmo se registró uno de menor intensidad en un pozo petrolífero antiguo de la zona, que servía para echar el agua residual en un momento en que se producía una falla tectónica, provocando el de mayor magnitud pero con una réplica menor.
“La ubicación de los sismo, el punto donde se almacenaba el aguay el aumento en la presión del pozo, dieron origen al fenómeno natural de 5,6 grados”, señalaron los investigadores.
Desde la década de 1950, Oklahoma ha sido el favorito de varias empresas para realizar perforaciones petrolíferas, mientras que se ha bombeado agua residual a pozos de eliminación desde 1993.