Toru Hashimoto, alcalde de Osaka
Las declaraciones del alcalde Osaka, Toru Hashimoto, en las que justificó el uso por parte de los japoneses de esclavas, conocidas con el nombre de “mujeres de consuelo” durante la Segunda Guerra Mundial, han suscitado la protesta de del gobierno chino.
Correspondió al portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores de China, Hong Lei, señalar que estaban “conmocionados e indignados por las declaraciones del político japonés, pues cuestionan flagrantemente la justicia histórica y la conciencia de la humanidad”.
Hong, expresó la respuesta del gobierno chino a lo expresado por Hashimoto, nacionalista y líder del Partido Restauración, quien señaló el lunes que las esclavas sexuales eran necesarios para “mantener la disciplina”, manifestando que el empleo de esas mujeres por el Ejército japonés fue un “grave crimen”, añadiendo tajante que la “forma en que Japón trate su pasado decidirá su futuro".
El político nacionalista japonés había dicho que "Cuando los soldados arriesgan sus vidas bajo las balas y hay que ofrecerles reposo en algún lado, está claro que se necesita un sistema de mujeres de confort”.
De acuerdo a lo sostenido por la mayor parte de historiadores, unas 200.000 mujeres asiáticas -principalmente coreanas, chinas y filipinas- fueron convertidas en esclavas sexuales en los prostíbulos implementados por los militares japoneses.