El maquiavelico no es Maquiavelo

 

Francisco Chappa Vicuña, Administrador Cultural y Organizativo, autor de estas líneas

Recibió un país con un crecimiento económico constante de 7 % promedio, con indicadores de competitividad y gestión empresarial ejemplares. Ofuscado en una falda Humala nos deja un país colapsado después de 4 años, un país que se derrumbaría si China este año no incrementara su producción minera en el sur del país, su pésima gestión política nos ha retrocedido como sociedad. Humala Tasso no tiene la astucia, dobles y valor del buen gobernante que describiera Maquiavello en el Renacimiento, Ollanta Humala es conflictivo, reticente, fingido; representa el maquiavelismo opuesto a la descripción de Maquiavello (confusión inducida desde el diccionario).Todo respetable ideólogo o dirigente en la historia del pensamiento , sea liberal, conservador o comunista priorizo al Estado sobre el individuo; la República y el pragmatismo sobre la anarquía o la rigidez ideológica; esa lógica no la comparte Humala, por eso el desgobierno al que nos ha llevado.

Niccolò di Bernardo dei Machiavelli (Florencia 1469-1527), defendió la organización del Estado, innovo la idea de nacionalidad basado en la ciudadanía y la participación de todas las clases en el gobierno; defendió la republica con valor científico sobre la monarquía escolástica y principesca; separo el Estado de la Iglesia cuando Santo Tomas defendía su dependencia del Papa (los jesuitas y protestantes lo desdibujaron póstuma y erróneamente); abrió el camino a la tolerancia religiosa, no fue un hombre de escritorio, fundo su doctrina política en la preeminencia de la razón del Estado sobre cualquier otra de carácter moral.

Maquiavello, era un realista político, un republicano que se adelantó 300 años a esta época, entendido, y seguido (consta en archivos y grabaciones) entre otros, por, Rousseau, Croce, Danton, Hobbes, Napoleón Bonaparte, Lincoln, Washington, Lenin, Gramsci, Churchill, Kissinger, Deng Xiaoping, Felipe Gonzales, Clinton, Brzezinski y otros políticos en el mundo. Sus detractores del irrealismo político, camuflado de moralizante le achacaron frases como: “el fin justifica los medios” (en ningún texto de El Príncipe o los Discursos existe esta frase), o con verdad, “la fuerza es justa cuando es necesaria", que rememora escenarios donde la crueldad inteligente es atributo del buen gobierno en defensa del orden y la democracia. Realismo que Goethe lo expresó con una famosa máxima: "Prefiero la injusticia al desorden", en Florencia, a la que defendió, existe en lo que fuera su casa, una lápida con esta concisa y enérgica inscripción: “A Maquiavelo, precursor audaz, inspirado, de la unidad nacional; al primero que enseño a su patria a servirse de sus propias armas”.

Maquiavelo desenmascaro la hipocresía de los gobernantes, fue el primer pensador político que priorizo la estrategia a largo plazo; origen de la planificación en el siglo pasado y del posterior pragmatismo político, como en China, Rusia y el resto del mundo hoy. El doble discurso chavista primer socio petrolero de los EE.UU y dizque su enemigo ideológico representa el maquiavelismo dispendioso y oscuro que secunda Humala; Esos príncipes sensualizados y dinásticos del medioevo que desnudo Maquiavello, son los fingidores irresponsables que hoy se alimentan de petrodólares o Petrobras.

Si los peruanos deseamos recuperarnos pronto y apartarnos de este despeñadero que el novelesco MVLL pontifico, debemos elegir un político pragmático de buen gobierno, no aventureros con dinero, un apellido o improvisados con poca lectura; necesitamos alguien con astucia, dobles y valor para la toma de decisiones trascendentes. Esta gigante empresa nacional, no solo requiere crecer con rapidez, descentralización y pragmatismo, sino sobre todo un consenso político, empresarial y social que asegure un camino inamovible de crecimiento económico con buena educación de muy largo plazo en el Perú.

Si Maquiavello después de demostrarle a los reyes como organizar y defender un buen gobierno usando sus propias armas y recursos fue copiado por los gobernantes en los siglos siguientes; sí la China de hoy imita su lógica, cuando repite: “no importa de qué color es el gato, importa que cace ratones”. Así, a los peruanos después del desplome económico y social que se resume en Humala, solo nos debe importar volver a crecer económicamente con la misma o mayor velocidad y lógica que le permitió a Alan García dejarnos un país ejemplar en América Latina, en este caso repetir no sería una ofensa, sería una responsabilidad confucianista que esperamos regrese mejorado.

FRANCISCO CHAPPA VICUÑA.
Administrador Cultural y Organizativo.