Basilea.- Tras varios días de fuertes protestas por parte de la comunidad musulmana, las autoridades austriacas prohibieron un videojuego en línea que invitaba a los usuarios a destruir mezquitas y matar a seguidores del profeta Mahoma.
El juego, llamado “Moschee Baba”, o “Adiós, adiós mezquita”, fue creado por integrantes del Partido de la Libertad, de extrema derecha, y había sido criticado por los líderes políticos y religiosos del país.
El presidente de Austria, Heinz Fischer, dijo que demostraba “una falta de gusto absoluta” y hasta el Secretario General de Naciones Unidas, Ban Ki-moon, mostró su indignación ante un videojuego al que tildó de “islamofóbico” y “totalmente inaceptable”.
Sin embargo, para el líder de la formación de ultraderecha, Gerhard Kurzmann, “Moschee Baba” era “sólo una manera de hacer que la juventud tome conciencia de nuestros problemas”.