Philippe Croizon es francés de nacimiento, tiene 42 años y no tiene brazos ni piernas, pero un autoestima y ánimo impresionante, que lo llevaron a realizar un viaje extremo por el mar.
Perdió todas sus extremidades en 1994 al sufrir un terrible electrocutamiento. Pero ello no fue impedimento para nadar, y es que esta vez Croizon buscó la forma de nadar desde su país Francia hasta nada menos que Inglaterra, por el Océano Atlántico.
Por su parte pudo completar el reto que el se trazó, de cruzar el Canal de la Mancha con unas aletas artificiales colocadas en sus rodillas.
Video: Youtube