Seúl.- Francia asume hoy la presidencia de turno del G20 con un ambicioso programa por parte del Presidente francés, Nicolas Sarkozy, y el reto de implantar las complejas directrices acordadas esta semana en Seúl.
Además, el G20 tendrá que afrontar una posible expansión de la crisis de deuda pública desatada en Irlanda y que podría trasladarse a países como España, Italia, Portugal o Grecia.
Sarkozy se apropió ya el viernes de una primera victoria en cuanto su homólogo surcoreano, Lee Myung-bak, le ofreció el relevo en Seúl al afirmar que "Francia ya ha contribuido aquí al consenso" del grupo que integra a los países más desarrollados y a los emergentes tras la firma de un documento de intenciones, que no se concretará hasta 2011.