Bangkok.- El hallazgo de más de dos mil fetos en un templo de Tailandia ha permitido descubrir a la Policía una compleja red de servicio de abortos a domicilio que tiene como principales clientas a mujeres adineradas.
El subdirector de la División contra el Tráfico Humano, Khanathat Musikanaon, indicó que el servicio de “tele-aborto” se ha vuelto más popular desde que la Policía incrementó los controles a las clínicas ilegales tras el macabro descubrimiento en el templo.
Los restos de los fetos en el monasterio de Phai Ngern, habrían sido descubiertos luego que los vecinos denunciaran el mal olor procedente del edificio.
Según datos oficiales del gobierno alrededor de 150,000 abortos ilegales se practican cada año en Tailandia y casi un 60% son madres menores de 25 años.