Madrid.- España vuelve estar a la vanguardia en la lucha contra el cigarro y sus efectos dañinos en la salud de los humanos. A partir de hoy empieza a regir la ley que prohíbe fumar en lugares públicos cerrados y algunos espacios abiertos como los parques infantiles y los alrededores de hospitales.
Se trata más bien del endurecimiento de una ley que ya estaba vigente desde el 2006 y que amplía la prohibición de fumar incluso en lugares como bares, restaurantes y discotecas. Incluso, en los aeropuertos del país se retiró los espacios privados destinados a los fumadores por considerarlos “insalubres”.
Los medios de comunicación también están sujetos a esta ley, que les exige a partir de este momento no emitir programas o imágenes en las que los presentadores o colaboradores fumen o publiciten tabaco.