Roma.- El Papa Benedicto XVI condenó el domingo el ataque a una iglesia de Egipto que el sábado dejó al menos 21 muertos, el más reciente de una serie de ataques contra cristianos en Oriente Medio y África.
"Este gesto vil de muerte, como el poner bombas cerca de las casas de cristianos en Irak para obligarlos a irse, ofende a Dios y a toda la humanidad", dijo el Papa tras el rezo del primer ángelus del 2011, consignó La Tercera.
"Ante esta estrategia de violencia que tiene como objetivo a los cristianos, y tiene consecuencias sobre toda la población, rezo por la víctimas y los familiares, y animo a la comunidad eclesiástica a perseverar en la fe y en el testimonio de no violencia del Evangelio".