Los tradicionales carnavales que se inician mañana en la capital serán vigilados desde el aire y tierra, mediante el patrullaje de tres helicópteros de la Policía y el despliegue de 10 mil efectivos que recorrerán diferentes puntos de la ciudad.
El personal policial estará muy atento para intervenir ante cualquier desorden público, acto delictivo, y cuando los carnavaleros atenten contra la integridad física de la población que no desee participar de estos juegos.
Según Javier Sanguinetti, jefe de la VII Dirección Territorial Policial (Dirtepol), las acciones de control aéreo y terrestre, se efectuarán con mayor intensidad en distritos como La Victoria, El Rímac, El Agustino, San Juan de Lurigancho, del cono norte y sur de la capital.
“En estas zonas son muy comunes estas prácticas, en las que algunas personas, con pretexto de jugar los carnavales, aprovechan para cometer hurtos, lesiones, causar desorden y no solo mojar, sino también pintar a los transeúntes que no desean participar de estos juegos”, explicó a la Agencia Andina.