París.- En lo que se considera una de las medidas más polémicas de los últimos años, comenzó a regir hoy en Francia la prohibición en las mujeres del uso público del burka y el velo islámico.
La ley fue aprobada en octubre en el Parlamento y se fijó un periodo de seis meses antes del comienzo de la aplicación de sanciones que van desde multas leves de 150 euros hasta más severas con dos años de cárcel y el pago de 60,000 euros.
Hasta el cierre de esta nota, la policía gala ya había detenido a cuatro mujeres que se negaron a cumplir la ley pues argumentaron que era contraria a sus derechos personales y libertades.
Según el gobierno lo que se busca es impedir que cualquier persona vaya con el rostro escondido en los espacios públicos como la calle, edificios adminsitrativos, comercios, restaurantes, colegios, etc.