El príncipe Guillermo está metido en un serio problema que podría dañar su imagen a pocos días de contraer nupcias con su novia Kate Middleton.
Resulta que unas fotografías que fueron tomadas en el 2002 salieron a la luz mostrando al heredero de la Corona Británica en ropa interior, recién salido de la piscina, y en las que también aparece una mujer que le coloca en la cintura boas de plumas de colores.
Las imágenes son de la fiesta de un amigo suyo James Tollemache a la que Guillermo asistió.
"Guillermo se lo estaba pasando realmente bien, y esas fotos muestran cómo no tenía reparos. No le importó quitarse la ropa. Es increíble pensar que es el futuro rey de Inglaterra", declaró al tabloide británico The People un asistente a dicha celebración.