No le avisó al presidente Ollanta Humala de su implicancia en un caso de corrupción porque suponía que el jefe de Estado ya conocía dicho tema.
Esa fue la razón, según la ministra de la Mujer Aída García Naranjo, por el que no advirtió al mandatario peruano de la denuncia que pesa en su contra desde 1993 por haber presuntamente participado en compras indebidas para la Municipalidad de Lima, cuando se desempeñaba como regidora.
Agregó que de ninguna manera pedirá la prescripción del caso, aunque precisó que tiene las pruebas para ser excluida del proceso.
No obstante dijo que acudirá a responder a la citación que hiciera la Primera Sala Penal para Reos Libres para el próximo viernes 14 de octubre.
"Es un proceso que data de 1994, pero vamos a afrontarlo de la mejor manera", subrayó García Naranjo.