Londres.- Una mujer de 30 años murió ayer por la tarde mientras participaba del maratón de Londres. La joven se desplomó antes de finalizar los 42 kilómetros de la prueba.
Originaria de North Kilworth, Claire Squires, se desmayó en Birdcage Walk, que es la última calle que tenían que enfilar los corredores antes de llegar al Palacio de Buckingham, junto a la avenida del Mall, donde está situada la línea de meta. Pese a ser atendida por los médicos, la corredora no pudo ser reanimada y falleció.
Según JustGiving.com, una página web que ofrece diferentes ideas para recaudar fondos, Squires corrió el maratón para ayudar económicamente al grupo Samaritanos, una organización benéfica dedicada a ayudar a personas con problemas emocionales.
Tras la muerte de Squires, las redes sociales como Twitter o Facebook han servido para dar a conocer aún más el fallecimiento de la británica y conseguir recaudar más fondos para los Samaritanos.
No era la primera vez que la corredora realizaba una obra benéfica de este tipo, ya que el pasado mes de marzo escaló el monte Kilimanjaro, en Tanzania, para conseguir fondos para la Real Fuerza Aérea británica (RAF).