Roma.- El portavoz del Vaticano, Federico Lombardi, negó que Jorge Mario Bergoglio, el flamante Papa Francisco, haya servido a la dictadura militar que gobernó la Argentina en la década 70, asegurando que la información relativa que ha salido en algunos medios es parte de una supuesta “campaña difamatoria” en su contra.
“No ha habido nunca una acusación concreta en su contra; nunca ha sido imputado de nada. Se tratan de calumnias y difamaciones que están enmarcadas en una campaña difamatoria. Son hechos antiguos, no probados y a la vez con una fuerte carga ideológica”, dijo el representante de la Santa Sede en conferencia de prensa.
Acto seguido, el padre José María Gil Tamayo señaló que las acusaciones contra el argentino deben contextualizarse en la época en que “no era todavía Obispo sino Provincial de los jesuitas”, en clara referencia a los presuntos dos jesuitas que fueron secuestrados y que no habían sido protegidos lo suficiente por el eclesiástico.
“Él ha negado de forma documentada, con pruebas, todas las acusaciones; existen en cambio muchas declaraciones que demuestran cuánto Bergoglio ha hecho para proteger a muchas personas en el tiempo de la dictadura militar en la Argentina”, recordó el español (Con información de CNN).