Benjamin Netanyahu acusado de soborno, fraude y abuso de confianza

El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, ha sido acusado de soborno, fraude y abuso de confianza, anunció el jueves el fiscal general Avichai Mandelblit, prolongando la incertidumbre política del país, ya que parece que se dirigirá a su tercera elección nacional en un año.

Netanyahu, quien ha negado haber actuado mal y dijo que es víctima de una "cacería de brujas", enfrenta hasta 10 años de prisión si es declarado culpable de soborno y un plazo máximo de 3 años por fraude y abuso de confianza, según expertos legales.

"Entregué mi vida a este estado, luché por ello, fui herido por ello. Tengo que decir que este es un día muy difícil", dijo Netanyahu en un discurso televisado a nivel nacional el jueves por la noche. "Creo que hay que estar ciego para ver que algo anda mal. Este es un golpe político".

El primer ministro insistió, sin presentar pruebas, que la acusación es una venganza política.

"Es muy inquietante lo que está sucediendo aquí y cómo la policía llevó a cabo esta investigación", dijo Netanyahu. "Este es un proceso contaminado, necesitamos investigar a los investigadores, no querían la verdad, me perseguían personalmente".

El principal rival político de Netanyahu, el ex jefe del ejército Benny Gantz, dijo que la acusación plantea preocupaciones de que el primer ministro "tomará decisiones en su propio interés personal y para su supervivencia política y no en el interés nacional".

Los dos estaban prácticamente empatados después de las elecciones de septiembre y cada uno no logró reunir una mayoría gobernante.

La medida para acusar a Netanyahu fue una "decisión despiadada", dijo Mandelblit a los periodistas el jueves, al rechazar las acusaciones de que el caso tiene motivaciones políticas.

En febrero, Mandelblit anunció que estaba considerando acusar a Netanyahu por un cargo de soborno y tres cargos de fraude y abuso de confianza, en tres casos diferentes. Los casos se conocen como Case 1000, Case 2000 y Case 4000.

El caso 1000 alega que Netanyahu recibió obsequios, incluidos cigarros y champaña, por valor de "cientos de miles de shekels" del magnate de Hollywood Arnon Milchan y otros partidarios.

El caso 2000 alega que Netanyahu llegó a un acuerdo de cobertura favorable con Arnon "Noni" Moses, el editor de un periódico israelí, Yediot Aharonot, a cambio de respaldar un proyecto de ley que debilitaría a un periódico rival.

El caso 4000 alega que Netanyahu tomó decisiones regulatorias que favorecieron al grupo de telecomunicaciones Bezeq a cambio de una cobertura positiva en el sitio web de noticias Walla.

La acusación se produce mientras Netanyahu se desempeña como primer ministro interino de Israel después de que no logró armar un gobierno el mes pasado.

Netanyahu esperaba aprobar una legislación que le impida ser acusado, pero no ha podido hacerlo porque no pudo formar el próximo gobierno de Israel después de las elecciones del 17 de septiembre.

"Lo que estoy pasando no es fácil... en mi familia día tras día, se derrama la sangre de mi familia", dijo Netanyahu el jueves por la noche. "No estoy dispuesto a sucumbir y dejar que haya tanta injusticia, continuaré liderando el país".

Netanyahu pidió un comité independiente para evaluar los cargos y las pruebas en su contra.

"No voy a dejar que ganen los mentirosos", dijo el primer ministro. "Voy a administrar y liderar este país, de acuerdo con las leyes".

El miércoles, Gantz anunció que tampoco había logrado formar un gobierno.

Netanyahu todavía tiene la opción de pedir inmunidad al Parlamento israelí. Pero esta solicitud debería ser aprobada por un comité especial que no se ha establecido debido al estancamiento político en curso.

Ahora hay 21 días en que cualquier miembro del Parlamento puede convertirse en primer ministro si reúne las 61 firmas necesarias para lograr una mayoría en la Knéset. Si eso no sucede, Israel volverá a las urnas.

Si eso sucede, la acusación de Netanyahu potencialmente plantea un nuevo problema legal.

Si gana las próximas elecciones, será la primera vez que un candidato para el gobierno está bajo acusación, lo que plantea la cuestión de si el presidente Reuven Rivlin puede darle a Netanyahu el mandato de formar el próximo gobierno.