La presidenta Dina Boluarte, quien sustituyó al expresidente Pedro Castillo la tarde del pasado 7 de diciembre luego de que este fuera vacado, anunció ayer que presentaría un texto de reforma constitucional orientado a permitir la convocatoria a elecciones generales en un horizonte de quince meses, es decir en abril de 2024.
He "decidido tomar la iniciativa de impulsar un acuerdo (...) para llevar a cabo las elecciones generales en abril de 2024", dijo la presidenta Boluarte, quien también anunció la declaración del estado de emergencia en las zonas más afectadas por las manifestaciones, es el caso de la región de Huancavelica: "He dado instrucciones para recuperar el control del orden interno y los derechos fundamentales de los ciudadanos".
A lo largo de los cuatro días que van de su presidencia, la exvicepresidenta de Pedro Castillo, ha tenido que ir variando de posición con respecto a su permanencia en el cargo de Presidenta de la República. En un principio, al día siguiente de su juramentación, hizo saber que había elegida en una plancha presidencial para el periodo 2021-2026. Poco más de un día después dijo que su permanencia en el cargo dependería de la evolución de la situación política del país.
Poco después del anuncio de Dina Boluarte, forzado por una jornada de protestas que arrojó un saldo de dos muertos en la región Huancavelica, se supo que en varios lugares del país los manifestantes no aceptaban el anuncio presidencial. En la ciudad de Pucallpa, región Ucayali, en el oriente peruano, trascendió en la prensa y en las redes sociales, los manifestantes han bloqueado los accesos y salidas. Algo que se corresponde con las noticias que llegan del Cusco.
Así las cosas, queda por saber si la decisión de la presidenta Dina Boluarte calmará los ánimos o por el contrario exacerbara el encono hacia ella y el Congreso de la República expresado por quienes desde el día mismo de su juramentación como presidenta de la República han tomado las calles en diversos puntos del país.