"Las amenazas por parte de Corea del Norte hacia su vecino del sur dañan no solo la seguridad de la península coreana, sino también de todo el mundo", opinó el ministro alemán de Exteriores, Guido Westerwelle.
Corea del Norte ordenó a las unidades de misiles "estratégicos" que estén preparadas para posibles disparos contra el continente de los Estados Unidos.
Lo curioso es que Washington no informó sobre estos contactos a su principal aliado en la región y solo informalmente confirmó uno de ellos, bajo presiones de la parte japonesa.