Benedicto XVI autorizó en los hospitales católicos alemanes el uso de la píldora anticonceptiva de urgencia, conocida como "píldora del día después", en mujeres víctimas de violación.
Para el periodista e investigador Daniel Estulin, la renuncia del papa Benedicto XVI se debe por la lucha interna entre la masonería y de la fe católica.
En febrero del año pasado Vaticano realizó por primera vez un simposio sobre la lucha contra la pedofilia en medio de múltiples casos de abusos sexuales.